miércoles, 4 de junio de 2014

Asperger sí, talentoso también.



Usualmente cuando una persona es diferente del común denominador de las personas, de la sociedad en general, suelen crearse prejuicios respecto a ella o subestimar sus capacidades en la realización de actividades. Tal vez cuando vemos a una persona muy callada, o sensible, o simplemente solitaria, solemos excluirla del grupo.

Pero lo que se desconoce es que probablemente tenga un desorden psicológico, como el síndrome de Asperger.

Tener el desorden del Síndrome de Asperger o TEA por sus siglas en inglés, no significa padecer de una temible enfermedad mental, es más, es relativamente nueva y suele ser desconocida por muchas personas e incluso varios profesionales en psicología suelen confundirla con otro desorden como el autismo.

El síndrome de Asperger fue reconocido por la comunidad científica allá por los años 1994, en la cuarta edición de la Asociación Psiquiátrica Americana, y lleva ese nombre gracias al psiquiatra y pediatra de origen austriaco (país que limita con Alemania e Italia) que realizó estudios sobre el caso, Hans Asperger.


Imagen de la pelicula "Mi nombre es Khan", cuyo protagonista en la historia tiene el desorden de Asperger.


¿Cómo sabemos si alguien posee el TEA? Pues hay ciertas características visibles que pueden reconocerse en una persona con Asperger. Entre las más importantes están por ejemplo:

  •   Se les hace difícil (pero no imposible) practicar deportes en equipo. Por lo tanto, prefiere jugar solo.

  •        Llora fácilmente por motivos pequeños. Por tal razón, podemos decir que es una persona muy sensible.

  •  Todo lo que se le pueda decir, lo interpretará tal cual lo escucha, es decir, si le dicen “A caballo regalado no se le miran lo dientes” probablemente si le regalan un caballo jamás mirará la dentadura del animal. Tampoco entiende los sarcasmos ni las frases en doble sentido.
  • Al entender todo tal cual se le dice, suele carecer de malicia. Por lo tanto, es muy sincero e inocente. Además, nunca mira a los ojos de las personas.
  • Tiene menos coordinación motriz y destreza. Por ejemplo, le costará abrocharse una camisa.


Ya que entramos un poco en contexto, el síndrome de Asperger no puede ser obstáculo para el desarrollo de la persona como tal en cuestión de su realización personal.  Pues a pesar de todo lo mencionado, cada persona con Asperger se expresa de manera distinta e incluso puede romper las barreras de su desorden mental con el debido tratamiento y cuidado de especialistas.


Merece recalcar y admirar a personas talentosas y reconocidas a nivel mundial, que aunque muchas de ellas no parezcan serlo, poseen el síndrome. 




Personajes ilustres de la ciencia como Albert Einstein, incluso en la industria del cine como Woody Allen o Steven Spielberg. Es más, el jugador de basketball norteamericano Rafer Alfston posee Asperger. Y para ellos poseerlo no fue ningún obstáculo. Simplemente, tienen súper poderes diferentes.



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