Suele suceder que mucha gente sin discapacidad no sabe qué
hacer cuando se encuentra con una persona con discapacidad y suelen cometer una
serie de errores acerca del trato que le pueden dar, a veces por temor o por la
confusión de tener a alguien “diferente” enfrente de ellos.
Si te relacionas con una persona con discapacidad no hagas
cuenta de si te puede no te puedo oír y ver, si bien ellos son personas con
limitaciones, han desarrollado muy bien los demás sentidos por lo que
comunicarse no es un impedimento, puede que te tome tiempo el mantener un
dialogo o quizás solamente un trato de saludo, pero debes aceptar la diferencia
y darte cuenta que es real y no subestimarla acerca de sus posibilidades y
dificultades, porque son personas al igual que tu.
Las personas con deficiencia tienen derecho, pueden y
quieren tomar sus propias decisiones y asumir la responsabilidad por sus
elecciones.
Tener una deficiencia no hace que una persona sea mejor o
peor que una persona no deficiente. Probablemente, por causa de la deficiencia,
esa persona pueda tener dificultades para realizar algunas actividades y, por
otro lado, podrá tener extrema habilidad para hacer otras cosas. Exactamente
como todo el mundo.
A la mayoría de las personas con discapacidad no les importa
responder preguntas, principalmente aquéllas hechas por niños, con respecto a
su deficiencia y cómo con ellas realizan algunas tareas. Pero, todo tiene un
limite en el cual no debes abundar en su intimidad.
Siempre muestra el
mismo trato que puedas tener con cualquier persona porque ellos son como tú.
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